Poema 7


Estamos colgados
entre dos tinieblas
una al nacer y otra
al morir
y allí todos
bailamos.


Me gustó mucho
ese olor a cadáver
que desprendía
tu último beso.
Puede pasear
este entierro hasta
el fin primaveral,
donde se juntan
cadáveres de tiempos
antiguos.
Ellos me siguen
por las calles
son los ex-enamorados
que marchan
sonrientes
a una fiesta emotiva
que ya no tiene
sentido
y menos aún
motivo.
Lágrimas horadan
la tierra
del desamor.
El cementerio
recibe
a los cadáveres
desenamorados
y a los asesinos
de amores
a esos que apuñalan
los que más
aman…
y luego lloran  en
el seno de la
madre tierra.
Me gusta sentir tu
olor a cadáver.